MANEJO DE LA INFECCIÓN DE LA HERIDA QUIRÚRGICA EN CIRUGÍA ORTOPÉDICA Y TRAUMATOLOGÍA

Introducción: 

Se considera infección de herida quirúrgica (IHQ) a cualquier infección relacionada con un acto quirúrgico, bien sea en el propio lecho quirúrgico o en su proximidad. Se estima que su prevalencia puede situarse entre el 2 y el 5% de las cirugías hospitalarias, según las series, pudiendo suponer graves complicaciones para el paciente.

Objetivo:

Elaborar un protocolo de actuación enfocado al correcto manejo de la infección de la herida quirúrgica en Cirugía Ortopédica y Traumatología y, así, disminuir las comorbilidades del paciente afectado.

Material y Métodos:

A través de una amplia búsqueda bibliográfica en las bases de datos Pubmed y de la biblioteca Cochrane, y apoyándonos en la última edición del Consenso Internacional sobre infecciones del Aparato Locomotor, hemos elaborado un protocolo sobre el manejo de la infección de la herida quirúrgica en la especialidad de Cirugía Ortopédica y Traumatología en nuestro centro hospitalario.

Resultados:

La prevención es el principal factor a tener en cuenta para evitar la infección de una herida quirúrgica. El manejo perioperatorio del paciente se antoja fundamental a la hora de prevenir la infección. La técnica quirúrgica debe ser lo más cuidadosa posible. Los cuidados de la herida quirúrgica se deben realizar por personal correctamente cualificado. Existen diversas pruebas complementarios para el diagnóstico de una infección de la herida quirúrgica, pero la sospecha clínica es la que ofrece mejores resultados para el paciente. En el tratamiento de la infección disponemos de diversas herramientas, tanto médicas como quirúrgicas y lo más frecuente es que se tengan que complementar entre ellas.

Conclusión:

La infección de la herida quirúrgica puede presentar graves consecuencias para la salud de la persona afectada. Es por ello que, la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de la misma son claves para garantizar la cura y correcta evolución del paciente.