LA VELADA DE OTUMBA

La Batalla de Otumba constituye uno de los hechos más singulares y sorprendentes de la historia. Después de perder a más de 800 compañeros en la tenebrosa “Noche Triste”, reducidos a apenas 400, Cortés y sus soldados y capitanes, sin cañones y todos heridos y sin pólvora apenas para sus escasos mosquetes, lograron derrotar a los, dicen, cerca de cien mil indios valerosos y bien armados que les acosaban sin piedad en las llanuras de Otumba.

Metidos de lleno  en tiempo de Hispanidades y héroes domésticos, esta Velada de Otumba, expresamente compuesta y preparada por Pedro Félix González y las gentes del Grupo de Teatro Francisca Cortés de la Estación Ecológica de Biocosmología de Medellín para las actividades de la Semana Cultural que gravitan alrededor del día de la Hispanidad en Medellín, se estrenó el jueves día 11 de octubre de 2009”, un drama que escenifica las tribulaciones de Hernán Cortés y los suyos la noche previa a la famosa gesta militar para la ocasión y cuyo principal objetivo es dotar de justicia histórica a los conquistadores españoles de principios del Siglo XVI, es en realidad un drama extraño escenificado en cinco cuadros durante casi dos horas,  donde la amenaza de una muerte inminente casi cierta se entrelaza con pesadillas viscosas y sueños de leyenda en la mente de un Cortés enajenado y heroico, en la terrible noche antes de la batalla. Desfilan por la fiebre evocadora del metellinense lugares y personajes históricos como la misma villa de Medellín, su madre Doña Catalina Pizarro, la “lengua” india Malinche, la esposa legítima de Cortés Doña Catalina Juárez o, incluso, la Reina Isabel la Católica, en una amalgama anacrónica llena de tristezas y nostalgias.