Quatro libros de la naturaleza y virtudes de las plantas y animales que estan receuidos en el uso de la medicina en la Nueva España y la methodo y corrección y reparación que para administrallas se requiere con lo que el Doctor Francisco Hernandez escr

A principios del siglo XVII, Francisco XiménezÂtraduce del latín al castellano la obra del médicoÂFrancisco Hernández, Rerum medicarum novaeÂhispanae thesaurus.ÂHernández trabajó en distintas ciudades españolas,Âhasta ser nombrado por Felipe II protomédicoÂde las Indias y marcharse a Nueva EspañaÂhacia 1571. Regresó en 1577, con dieciséisÂvolúmenes de notas destinados a Felipe II.ÂÉstos contenían sus estudios, acompañadosÂpor ilustraciones llevadas a cabo por pintoresÂindígenas, y recogían los usos medicinales queÂlos médicos autóctonos daban a las hierbas.ÂHernández murió en 1587 sin ver impresa suÂobra. Su editor, Recchi, falleció asimismo enÂ1595, sin poder completar el trabajo. Por fin,Âentre 1648 y 1651, vieron la luz los primerosÂejemplares.ÂFrancisco Ximénez editó la traducción delÂtexto de Hernández, Quatro libros de la naturalezaÂy virtudes de las plantas… en 1615, antes de que seÂpublicara completa la obra original. Ximénez,Âenfermero del convento del hospital de Huaxtepec,Âutilizó para esta edición una copia delÂresumen de Recchi, ya que no se conservóÂninguna de las copias manuscritas que HernándezÂhabía dejado en México. A la traducciónÂañadió algunas observaciones personalesÂy suprimió las ilustraciones. Si FranciscoÂHernández, médico y científico, culminó conÂsu obra la evolución de la historia natural en elÂsiglo XVI, la traducción al castellano y las observacionesÂde Francisco Ximénez suponenÂevidentemente un avance, pero no añaden elementosÂde revolución científica. Es, pues, unÂclaro ejemplo de la situación general de la cienciaÂespañola en el tercio inicial del siglo XVII: seÂmantuvo lo logrado en el Renacimiento, alÂmargen de las nuevas corrientes europeas.